Desde el Pabellón Infantil nos acercamos al Pabellón de Rumanía para charlar con la escritora Adina Rosetti, autora del libro Domnisoara Poimaine si joaca de-a Timpul, justo cuando acaba de realizar un taller con niños de familias de Rumanía escolarizados en España. La escritora rumana ha terminado la sesión lanzando pompas de jabón y los niños a su alrededor ríen. A la conversación inicial se incorpora la ilustradora Cristiana Radu que va a aportar su mirada desde el punto de vista de la ilustración.
¿Cómo definirías tu escritura para niños?
AR: Escribo cuentos para niños inspirados en mi vida y en la vida de mis hijos intentando llevar los hechos reales al terreno de la fantasía. Pretendo explicar, a la medida de los niños, y de manera juguetona y no muy didáctica los temas que les preocupan a los niños. Este libro, concretamente, está inspirado en las preguntas sobre el tiempo que me hacía mi hija. Intento ser creativa y también dejar a los niños su espacio en el cuento, no siendo impositiva.
¿Tu literatura tiene influencias de la literatura infantil de tradición popular rumana?
AR: Intento mezclar. Creo que los niños necesitan cuentos contemporáneos y a la vez la presencia de los clásicos. En un segundo libro que acabo de escribir aparecen personajes de la tradición: dragones, princesas y hasta un príncipe azul. Traigo a estos personajes a situaciones de hoy: usan tabletas, viven en pisos… No renuncio al pasado pero lo traslado al mundo de hoy.
¿En qué momento se encuentra la literatura infantil rumana?
AR: En los últimos cinco años se ha producido un renacimiento de la LIJ. Cada vez hay más interés y hay más escritores adultos consagrados que escriben también para niños.
Aquí interviene la ilustradora que se ha sumado a la conversación:
CR: En el caso de los ilustradores es algo distinto. Siempre han existido buenos ilustradores desde los años 90 y 2000. Durante los años 90 no pudieron expresarse mucho pues no había edición dedicada a los niños y los ilustradores solo podían exponer. Cuando la edición de libros infantiles crece, estos ilustradores de formación artística han comenzado a expresarse a través de la literatura con excelentes resultados.
Nos hemos encontrado con muy pocos libros infantiles traducidos al castellano. ¿Podríais señalar algunos motivos?
AR: Es una cuestión para planteársela a los editores. No sabemos cómo se percibe esta literatura en España ni cuál es el interés para su traducción pero encuentros como este (el hecho de que Rumanía sea el país invitado en la FLM) favorecen el encuentro y el conocimiento de nuestra literatura.
¿Existe desde los organismos estatales una promoción del libro infantil y de la lectura?
AR: Existen iniciativas a pequeña escala. El estado pone en marcha pequeños programas como este pero en el país hay zonas en las que los niños no tienen acceso a los libros. Aprovechando la invitación a la FLM un grupo de escritoras nos hemos reunido en una asociación: Asociación de escritoras para niños y adolescentes que tienen como misión divulgar en los centros escolares la literatura infantil rumana e impulsar la creación de buenas historias.
Les pedimos, para finalizar, a cada una de ellas que nombren un autor y un ilustrador que les guste y les inspire. Roald Dahl y también Salman Rushdie son los nombrados. Los ilustradores son Isidro Ferrer y Javier Zabala.
Después de la entrevista visitaron el pabellón infantil acompañados de la traductora Iuliana Botezan, junta a la que aparecen en la foto que ilustra esta entrada.