Una de las características más sorprendentes del Pabellón Infantil es que su capacidad de acogida es siempre más grande de lo que parece y las lindes del bosque que lo circunda son generosas y flexibles. Lo demostraron en la mañana del martes al dar cobijo a más de 180 niños y niñas entre 3 y 5 años que sentados en el suelo escuchaban subyugados los cuentos del bosque que cuenta Anahí con su encanto y su música.
En la segunda parte de la mañana, Margarita del Mazo volvió a visitarnos, esta vez para encontrarse con los escolares. Fueron 44 alumnos del colegio Aguirre los que tuvieron la oportunidad de escucharle contar historias de su libro El Mosquito, obra editada por Ediciones Jaguar que quedó finalista en los premios Junceda 2010. Los alumnos no perdieron ripio del relato en el que un anciano, ante el temor que siente frente a una serpiente que se lo quiere comer, busca la ayuda de un mosquito, al que a cambio ofrece una dentadura gigante con la que satisfará su voracidad. Después la autora desarrolló un taller en el que pidió a los niños que en grupos dibujaran un mosquito y la mañana terminó entre nubes de mosquitos zumbando en el pabellón.
Y también la tarde de este martes de junio dio mucho de sí, tanto que parecía viernes. La actividad patrocinada por Oír es Clave colgó el cartel de no hay billetes y el ilustrador Álvaro Núñez fue sacando como por arte de magia trogloditas de su rotulador hasta construir un cómic que luego colorearon entre todos los asistentes. Tras la palabra hablada y la ilustración, el FIN del día vino con el taller de escritura dirigido por Educep, en el que un grupo de futuros escritores inventaron sus propios cuentos bajo la pauta de las instrucciones de los monitores.
La Feria del Libro de Madrid avanza día a día, y aún nos quedan en esta semana interesantes propuestas en nuestra agenda y muchas historias que contaros, así que no faltéis, de aquí al domingo esperamos veros a todos.
